EL PRINCIPIO CAVETA DE PROYECTO AISO (O LA SENSACIÓN DE BIENESTAR GENERAL EN LOS ESPACIOS INTERIORES)

Un 80% de nuestro tiempo lo pasamos en espacios interiores. La casa, la oficina, los bares, tiendas…Cuando se habla de arquitectura sostenible, parece que siempre se hace referencia a aspectos como el ahorro de energía, el uso de energías renovables, o el tipo de cerramiento, entre otros, pero pocas veces se habla de la relación entre la sostenibilidad, el confort interior y la salud.

La sostenibilidad abarca muchos aspectos relacionados con la calidad del diseño del espacio interior, por lo que Proyecto AISO crea el PRINCIPIO CAVETA, el cual consiste en la implantación en nuestros proyectos de interior de estrategias saludables que aseguren un/a adecuado/a:

CA: calidad del aire,

V: confort visual

E: ergonomía

T: confort térmico

A: confort acústico

de la manera más económica y sencilla posible. Muchas veces se trata más de NO hacer que de hacer.

¿En qué consisten cada una de las estrategias del Principio CAVETA?

CALIDAD DEL AIRE (CA)

Es curioso cómo nos preocupamos siempre de la contaminación de las ciudades pero no reparamos en el aire que respiramos en nuestros hogares o espacios de trabajo. Si éste no se renueva, es un aire viciado, y nos puede llegar a producir ojos irritados, estornudos, fatiga, dolor de cabeza, tos, alergias, enfermedades respiratorias e incluso cardiopatías. El aire viciado no sólo ataca nuestra salud física, sino también mental. Se ha demostrado que una mala calidad del aire afecta al rendimiento de trabajadores y estudiantes.

La calidad del aire no se basa en que éste tenga la adecuada temperatura en verano o invierno (eso es el confort térmico) sino en el control de la humedad, los ácaros, gérmenes y los COVs (sustancias químicas procedentes de los propios materiales constructivos que causan efectos nocivos en la salud)

En general, existen dos estrategias para asegurar la calidad del aire:

1. Evitar la presencia de partículas volátiles en el aire, fomentando materiales naturales y ecológicos que sean bajos emisivos en COVs, como la piedra, la madera o pinturas naturales. Además de contribuir en un ambiente más saludable y estético, estos materiales reducen la huella ambiental, ya que tienen en cuenta en el proceso de fabricación criterios medioambientales.
Además, en Proyecto AISO apostamos por el diseño biofílico, ya que las plantas
aumentan la humedad del ambiente interior y absorben los contaminantes tanto a través de sus hojas y raíces.

2. Mejorar la ventilación. Existen dos tipos de ventilación: natural y mecánica.
La primera, como su propio nombre indica, es una estrategia pasiva, y consiste en abrir las ventanas un mínimo de media hora al día, instalar carpinterías con aireadores o con una tercera posición de apertura que permita introducir aire renovado. Pero claro, esto tiene un inconveniente, y es la pérdida de calor en invierno o frío en verano, por lo que es muy común optar por mantener las ventanas o rejillas cerradas, evitando que la humedad y los malos olores se vayan.
Este problema se soluciona con la ventilación mecánica, en concreto, mediante los sistemas de doble flujo, los cuales extraen el aire viciado a la vez que impulsan al interior aire del exterior, el cual se filtra previamente, para ser más puro.

CONFORT VISUAL (V)

Fuente: Google

El confort visual no se basa únicamente en la ausencia de incomodidad al ver, sino también en aspectos como una distribución uniforme de la luz, ausencia de deslumbramiento y reflexiones o una buena representación del color. Una iluminación adecuada, así como la presencia de vistas despejadas (tanto en exterior como en interior a través del orden y la ausencia de elementos prescindibles) mejoran nuestro estado de ánimo y nos proporcionan un bienestar general.

La luz natural es imprescindible para el confort visual, ya que es a la que mejor se adaptan nuestros ojos, y es por lo que en todo proyecto se debe aprovechar al máximo esta fuente de luz. Es cierto que en obra nueva es más fácil introducirla gracias al estudio detallado de la orientación y el correcto diseño de las aberturas, pero en reforma existen otras estrategias en el interior para fomentar la luz natural. Algunas son:

– colores claros. No sólo en paredes, sino también en mobiliario y textiles, como las cortinas
– espacios diáfanos o tabiques transparentes
– jugar con reflexiones

La luz natural no sólo mejora los patrones de sueño y disminuye el riesgo de depresión, sino que también genera un gran ahorro de energía.
Pero no podemos olvidar la luz artificial. La domótica en este campo juega un papel importante, no sólo mediante elementos como los detectores de presencia, sino también con reguladores de intensidad, que permiten crear diferentes ambientes y ahorrar energía.

ERGONOMÍA (E)

Fuente:google

La ergonomía es la adaptación de las condiciones del entorno a las necesidades del ser humano, ya sean físicas como socio-culturales. Es decir, se basa en el estudio de las medidas, la forma, los acabados, texturas, e incluso el color, ya que todo ello tiene un impacto en el usuario del mobiliario o espacio.

Por ejemplo, diseñar un despacho no es tarea fácil. Hay que tener en cuenta diferentes aspectos, como el número de personas que van a estar en él para determinar los recorridos y su dimensión, la altura de las mesas, si tienen o no cajones, dónde estarán situados, si hay o no otros muebles de almacenamiento y si son de fácil acceso o no, además de otros aspectos como, la forma y textura de la silla nos comunicarán si invita o no al relax… En el diseño de interiores la estética va unida de la funcionalidad y la viabilidad, por lo que es necesario contar con un profesional que tenga en cuenta todos estos aspectos para no convertir un despacho en un espacio frío y anodino, pero tampoco en una sala de estar. El equilibrio es la clave para satisfacer todas las necesidades.

Por otra parte, el hecho de que un espacio sea ergonómico tiene que ver también con la adaptación de éste a las necesidades presentes y futuras de los usuarios que lo van a habitar. En este sentido, la accesibilidad, versatilidad y flexibilidad de un espacio son aspectos fundamentales de la sostenibilidad, ya que implican la ausencia de reformas en el futuro para adaptarse una y otra vez a los requerimientos venideros, con el ahorro económico y material que ello conlleva.

Para Proyecto AISO, la ergonomía es un claro reflejo de lo sencillo y natural, generando espacios agradables al hábito y a la vista. Por lo que es aquí donde el diseño biofílico en el interior es imprescindible para restablecer los vínculos entre la naturaleza y el ser humano, perdidos por nuestro estilo de vida en entornos urbanos.

¿En qué consiste el diseño biofílico?

  • Incorporar elementos de la naturaleza a través de plantas, jardines verticales, olores de flores, una pequeña fuente para sentir el sonido del agua…
  • Emplear análogos de la naturaleza mediante la utilización de colores tierra; materiales como el cuero, la madera, la lana…; o formas sinuosas y patrones geométricos que evoquen elementos naturales.
  • Crear espacios naturales. Esto no consiste en incorporar plantas, sino en que los espacios se entiendan por sí mismos y sean funcionales. Es decir, ergonómicos.

 

CONFORT TÉRMICO (T)

Fuente:pixabay

El confort térmico en un espacio interior dependerá de factores relativos a las personas que lo ocupan y a las condiciones ambientales interiores.

Por un lado las personas desprendemos calor, ya que transformamos las calorías que nos proporcionan los alimentos en energía, la cual liberamos al entorno en forma de calor.

El bienestar térmico se establece cuando el cuerpo pierde calor a la velocidad adecuada; una mayor velocidad implica sensación de frío y una menor velocidad, sensación de calor. Esta velocidad depende las condiciones ambientales interiores, es decir, la temperatura, la humedad del ambiente y la velocidad del aire. Por lo que la envolvente es uno de los primeros elementos a considerar para que un espacio interior sea eficiente y confortable, ya que actúa como filtro

entre el clima exterior y el ambiente interior, estabilizando la atmósfera interior. La configuración adecuada de la envolvente da como resultado un entorno interior bien equilibrado y reduce el uso de sistemas mecánicos, lo que contribuye a una estructura más sostenible. Es esencial tener en cuenta lo siguiente al diseñar: aislamiento, ganancia solar, inercia térmica y ventilación de aire.

  • El aislamiento; interior, exterior o en cámara. Sin olvidar los puentes térmicos y la incorporación de carpinterías con doble o triple acristalamiento y rotura de puente térmico.
  • Inercia térmica; a través de los materiales, por ejemplo la piedra o el ladrillo
  • Ganancia solar; a través de los acristalamientos o sistemas de sombreamiento para jugar en mayor o menor medida con la captación solar
  • Ventilación; mediante sistemas de ventilación natural o mecánica.

La incorporación o no de sistemas de climatización y calefacción, así como el tipo y su potencia dependerá directamente de estos factores, por lo que es imprescindible contar con un profesional para que te asesore, ya que, por ejemplo, no servirá de nada instalar un suelo radiante con aerotermia (porque hemos escuchado que funciona muy bien, es muy confortable y supondrá un ahorro energético y económico) si no llevamos a cabo las medidas necesarias, como aislar perfectamente la vivienda o colocar un pavimento de gran inercia térmica, ya que el suelo radiante trabaja a baja temperatura, por lo que es necesario un correcto aislamiento.

Por otro lado, la actividad y el grado de aislamiento del usuario aportado por la vestimenta influye en dicha transferencia del calor. Cuando el balance en dicha transferencia de calor es neutro, alcanzamos el confort térmico.

CONFORT ACÚSTICO (A)

Los sonidos son tan habituales en nuestra vida cotidiana que a veces apreciamos más su ausencia que su presencia. El ruido es un agente ambiental nocivo muy presente en las ciudades que perjudica la salud psíquica y física de las personas. Si bien es cierto que es imprescindible aislar acústicamente la envolvente (los aislamientos térmicos, siempre tienen un considerable factor de aislamiento acústico) y que las ventanas cumplan el mínimo aislamiento acústico exigido por el CTE, no podemos olvidar el aislamiento acústico entre estancias, no solo con las colindantes, laterales, sino con las superiores o inferiores también.

El diseño interior sostenible tiene que ser amable con el usuario, por tanto un buen confort acústico es vital.

 

CONCLUSIÓN

En resumen, la sensación de bienestar o de incomodidad que se aprecia en un espacio interior no es la consecuencia de estímulos aislados, sino de la combinación compleja de todos ellos y de su acción simultánea. Es difícil que en un ambiente podamos sentirnos claramente bien por el efecto de la temperatura, pero al tiempo mal por la humedad, molestos acústicamente, con una luminosidad inaceptable y con olores placenteros; las sensaciones terminan por influirse unas sobre las otras.

Lo mismo ocurre con el concepto de sostenibilidad, éste no se basa únicamente en apostar por instalaciones o electrodomésticos de etiqueta A+++(ojalá el ahorro y el confort dependieran únicamente de ese aspecto) sino en un conjunto de aspectos relacionados estrechamente entre sí, los cuales mejorar nuestro estilo de vida en general.

2 Comments
  • Fernando Casas Lorrnzo
    Posted at 21:07h, 08 octubre Responder

    Tiene un análisis completo y muy bien desglosado de todos y cada uno de los conceptos a tener en cuenta, para buscar las soluciones necesarias y más convenientes.
    Me gusta mucho.

    • admin
      Posted at 21:38h, 01 noviembre Responder

      ¡Muchas gracias! Nos alegra que te sea útil!

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